¿Tiene cabida un V6 diésel en el mercado actual? Audi cree que sí y lo trae con etiqueta ECO

En un sector del automóvil donde el diésel es visto por muchos como una tecnología en declive y la electrificación marca el ritmo, se valora la valentía y la diferenciación. Audi desafía al resto con la renovación de su motor diésel V6 3.0 TDI a pesar de que parecía que terminaría desapareciendo. La firma de los cuatro aros presenta una evolución de su bloque con una adaptación a los tiempos que corren. Consigue la etiqueta ECO de la DGT gracias a la electrificación y estará presente en dos de sus modelos más importantes.

Con este movimiento, Audi busca convencer a los conductores más exigentes de que la eficiencia y la respuesta reactiva del diésel pueden coexistir. La clave de este renacimiento radica en la integración, por primera vez, de la tecnología de hibridación ligera MHEV plus con un avanzado compresor eléctrico. Este sistema de propulsión combina tres componentes electrificados que actúan de manera coordinada para mejorar la experiencia de conducción desde el momento del arranque.

Al motor V6, que sirve como base, hay que sumar el sistema MHEV plus, que ya hemos visto ligado al TDI de cuatro cilindros. Está formado por un generador del sistema de propulsión (PTG), un alternador de arranque por correa (BAS) y la batería de fosfato de hierro y litio. Esta configuración permite una electrificación ligera que permite que el vehículo se desplace en modo puramente eléctrico en momentos concretos. También mejora la respuesta gracias a ese aporte de 18 kW (24 CV) y 230 Nm de par.

Por otro lado, aparece el compresor eléctrico (EAV), que tiene como misión eliminar el principal inconveniente de los motores turboalimentados: el famoso «turbo lag» o el retraso en la entrega de potencia. Alimentado por el sistema eléctrico de a bordo de 48 voltios, el EAV entra en acción cuando la demanda de potencia es alta y el turbo convencional aún no ha alcanzado el régimen óptimo de giro. El resultado es una respuesta lineal e inmediata al pedal, con altos valores de par disponibles desde muy bajas revoluciones.

En la práctica, esto se traduce en una aceleración notablemente mejorada y una sensación al volante que se asemeja mucho a la respuesta instantánea de un motor eléctrico. Esta combinación garantiza una potente entrega de 299 CV y 580 Nm de par máximo, sin comprometer el consumo de combustible. El nuevo motor V6 3.0 TDI incluso se permite la licencia de mirar al futuro, ya que está homologado para utilizar el diésel HVO 100, un combustible que viene de materiales residuales y de desecho, como el aceite de cocina usado.

Esta mecánica está disponible en dos pilares de la familia de los cuatro aros: los Audi A6 y el Audi Q5. Los precios parten en España desde 82.270 euros para la berlina y desde 82.600 euros para el todocamino. Con este lanzamiento, Audi ofrece una alternativa para el conductor que prioriza la autonomía y las prestaciones en largos recorridos, sin renunciar a los beneficios de la etiqueta ECO.