BMW Serie 7 2019

Tras varias filtraciones y algunas polémicas, ha sido presentado el BMW Serie 7 2019. Se trata de una actualización para la berlina de representación de la marca alemana. Una evolución bastante notable dentro de la sexta generación que llegó al mercado en 2015. Un lavado de cara con muchos cambios a nivel estético, pero también con actualizaciones en equipamiento y motores para estar a la altura. No hay que olvidar que sus rivales principales, el Audi A8 y el Mercedes Clase S habían tomado la delantera en algunos aspectos tras renovarse recientemente.

Lo primero que vemos en el buque insignia es que sus dimensiones se modifican ligeramente. Crece en longitud, pues alcanza los 5,12 metros en su versión estándar (5,26 metros para el de batalla largo), mientras que la anchura se mantiene en 1,90 metros y la altura en 1,47 metros. En todo caso, este pequeño incremento apenas se notará en la habitabilidad del interior ni en el maletero, que suponemos que sigue estando en 500 litros.

Como decíamos, la polémica ha venido por su diseño exterior. Lo cierto es que mantiene la esencia y la filosofía del modelo, pero el frontal cambia considerablemente. Sin duda, lo que más llama la atención es la nueva parrilla con dos riñones de dimensiones algo exageradas, una fórmula tomada directamente del BMW X7. Ahora están aglutinados en una sola pieza y la superficie total ha crecido en un 50 %. Además se trata de una rejilla con control activo que se va abriendo o cerrando en función a las necesidades.

Lo cierto es que esta parrilla ha condicionado todo el frontal del vehículo, pues invade la parte inferior del capó (que también es nuevo) y hace que el morro quede en una posición 50 mm más elevada. Los riñones ganan en verticalidad y las ópticas en horizontalidad, pues el Serie 7 cuenta con unos faros muy estrechos que pueden llevar la tecnología Laser BMW. En la parte inferior, el paragolpes tiene una forma peculiar para reconducir el aire hacia los laterales.

En el perfil se puede apreciar que esencialmente el modelo sigue siendo el mismo, la silueta es prácticamente calcada. Hay nuevos diseños de llantas y también cambian los «Air Breathers», esas peculiares tomas de aire laterales. La zaga no ha cambiado tanto como el frontal, pero aún así vemos algunas modificaciones. Hablamos de los pilotos unidos por una fina tira LED en el centro o los cambios en la parte inferior del paragolpes, que integra las salidas del escape en una moldura cromada.

BMW Serie 7 2019. Motores

La gama de motores del BMW Serie 7 seguirá siendo muy diversa, con opciones de varios combustibles y en un amplio rango de potencia.

Como se puede apreciar, hay motores para todos los gustos. La característica que tienen todos en común es la transmisión automática Steptronic de ocho velocidades, única caja de cambios disponible en la gama. La mayoría de versiones pueden escogerse con la tracción trasera o con la tracción total xDrive, al igual que con la carrocería normal o con la de batalla extendida (en algunos casos no hay opción).

Algunas curiosidades que se quedan sin decir en la tabla es que el híbrido enchufable, 745 e, ofrece una autonomía eléctrica de hasta 58 kilómetros y un consumo de apenas 2,1 l/100km (NEDC). Por otra parte decir que el V8 de gasolina es novedad (deriva del que monta el BMW M5) y que el V12 se mantiene haciendo gala de la tradición del modelo y siendo de los pocos que queda en el mercado con esta configuración.

BMW Serie 7 2019. Equipamiento

El interior del nuevo BMW Serie 7 quiere convertirse en la referencia y para ello destaca en cuanto a tecnología y en cuanto a calidad. Cuenta con las últimas novedades de la marca, como queda claro tras ver la instrumentación digital de 12,3 pulgadas o la pantalla táctil central de 10,25 pulgadas. No puede faltar el nuevo sistema operativo BMW 7.0 o el BMW Intelligent Personal Assistant para facilitar la vida del usuario.

El equipamiento será prácticamente ilimitado. En el BMW Serie 7 se pueden montar algunas nuevas tapicerías y hacer todo tipo de virguerías gracias al programa BMW Individual. Las plazas traseras reciben una atención especial, como es lógico, pues muchos usuarios acostumbrarán a viajar allí. Por eso se encuentran dos butacas de grandes dimensiones con facilidades como la iluminación ambiental. En la versión de batalla extendida se pueden equipar pantallas en los reposacabezas delanteros y una consola central con todo tipo de accesos.

En el apartado de ayudas a la conducción también encontramos una extensa lista de sistemas. Hay elementos como el control de crucero activo con función Stop&Go, parking assistant, Head-Up Display o la visión nocturna. Con el paquete Driving Assistant Professional se completan al máximo y se logra una conducción semi-autónoma.

Fuente: BMW

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