Porsche sigue apostando por la combustión y patenta un motor de seis tiempos

Muchas han sido las marcas que han tratado de tirar la casa por la ventana con la electrificación y han terminado reculando en el intento. También ha habido otros fabricantes que han seguido apostando por la combustión y buscando alargar su vida lo máximo posible. Porsche es una de ellas, pues su enfoque no podía hacer que se limitase por completo a la tecnología enchufable. De hecho, han seguido desarrollando proyectos muy llamativos en paralelo. Ahora ha salido a la luz un motor de seis tiempos que han patentado y que podría conseguir cifras muy esperanzadoras en términos de eficiencia de cara a los tiempos que están por llegar.

Según descubrió recientemente AutoGuide, la firma de Stuttgart presentó en febrero una solicitud de patente (la 18/585.308) ante la United States Patent and Trademark Office’s (USPTO) que tenía ciertas peculiaridades. Este trabajo hecho en conjunto con la Universidad Técnica de Cluj-Napoca en Rumania habla de un motor de seis tiempos, que queda descrito como un «dos tiempos por tres». Esta mecánica cuenta con un cigüeñal único que se mueve dentro de un anillo consiguiente un movimiento circular en el que no hay puntos muertos. En otros motores convencionales, cuando gira el cigüeñal se generan dos puntos muertos superiores y dos inferiores durante el ciclo.

Para que nos hagamos a la idea, este motor completo un ciclo completo cuando el cigüeñal hace una rotación de 1.080º, lo que equivaldría a tres vueltas completas. Sería como tener dos procesos de tres tiempos, dejando las fases en el siguiente orden:

1. Admisión
2. Compresión
3. Explosión/Expansión
4. Compresión
5. Explosión/Expansión
6. Escape

Con este funcionamiento, el pistón alcanza el punto muerto alto superior entre el segundo y el tercer tiempo, y otra vez durante el cuarto y el quinto. El bajo llegaría entre el sexto y el primer tiempo. Por otro lado, el punto muerto inferior alto está entre el primer y el segundo tiempo, y luego entre el quinto y el sexto. El bajo aparece entre el tercer y cuarto tiempo. Para que su funcionamiento sea equilibrado se usa pistones conectados a un engranaje planetario a través de una biela. Ese engranaje gira dentro del anillo y va conectado al cigüeñal.

De esta forma, el pistón va alcanzando los puntos muertos en las diferentes posiciones y ocurre ocurre el ciclo de seis tiempos. Con este sistema se pueden incluir sistemas para ajustar la relación de compresión y la sincronización, mejorando la eficiencia. Incluso podría utilizarse con combustibles sintéticos o con combustión de hidrógeno. Por no hablar de que puede tener más potencia específica que los motores de dos y cuatro cilindros, y que podría adaptarse a configuraciones de cilindros en línea, en V o de tipo bóxer.

Fuente: Autoguide