Cómo matricular un coche extranjero en España: pasos a seguir y costes de este trámite

En más de una ocasión nos hemos planteado comprar un coche fuera de España. Los motivos son variados, a veces es porque es más barato en otro país (porque hay más oferta), otras porque directamente es difícil de encontrar en territorio nacional. Ya hemos comentado el caso particular de Alemania. Sea como fuere, la siguiente pregunta que nos hacemos es la siguiente: ¿cómo se puede matricular un coche extranjero en España?

No vamos a andarnos con rodeos: el proceso de matricular un coche extranjero en España es un laberinto de papeles, citas y tasas. Requiere paciencia (mucha) y pasar por caja varias veces. Pero no hay que temerle, solo hay que ir con el mapa en la mano. Las claves podrían ser algunos aspectos como la organización de los documentos y el tener claro el origen del coche, pues cambia en función del país. En todo caso, es perfectamente abordable y te vamos a contar todos los detalles.

Origen del coche

Este es el punto de partida. El papeleo cambia radicalmente dependiendo del origen del vehículo:

• Vehículos de la Unión Europea (UE): El proceso es más sencillo. No hay aduanas.
• Vehículos de fuera de la UE (incluido Reino Unido tras el Brexit, Suiza o EEUU): Aquí la cosa se complica. Tendrás que pasar por Aduanas y presentar el DUA (Documento Único Administrativo). Además, prepárate para pagar el 21 % de IVA (si no es por cambio de residencia) y el arancel (normalmente un 10 %).

Documentación necesaria

Antes de empezar a pedir citas, asegúrate de tener esta carpeta con la documentación lista. Sin esto, no haces nada:

1. Documentación original del vehículo: Ficha técnica y permiso de circulación del país de origen. Se recomienda encarecidamente la traducción jurada.
2. Factura de compra (si se lo compraste a una empresa) o Contrato de compraventa (si fue a un particular). Importante: Si está en otro idioma, es muy probable que necesites una traducción jurada.
3. COC (Certificado de Conformidad): Es el «DNI» del coche a nivel europeo. Si el coche no lo tiene (o es muy antiguo), necesitarás una Ficha Técnica Reducida firmada por un ingeniero español.

Pasar ITV al coche

Una vez reunida la documentación técnica, el vehículo debe someterse a una inspección específica. Se debe solicitar una ITV previa a matriculación, que es más exhaustiva que la inspección periódica. En esta fase se verifica que el vehículo cumpla con todas las normativas de seguridad y medioambientales vigentes en España. Si la inspección es favorable y se aprueba la homologación, la estación de ITV emitirá la Tarjeta de Inspección Técnica Española (o Ficha Técnica Española).

Los pagos necesarios para matricular coche extranjero

Aquí es donde el proceso se vuelve doloroso para el bolsillo. Con la Ficha Técnica española ya emitida, toca rendir cuentas con tres impuestos:

1. Impuesto Especial sobre Determinados Medios de Transporte (IEDMT): también como Impuesto de Matriculación, se gestiona mediante el Modelo 576 ante la Agencia Tributaria. Su tipo impositivo está directamente ligado a las emisiones de CO2 del vehículo según los tramos establecidos por ley. No se paga con las emisiones inferiores o iguales a 120 g/km, es un 4,75 % con emisiones entre 121 y 159 g/km, un 9,75 % para los coches de entre 160 y 199 g/km y del 14,75 % para los que superen los 200 g/km. La base imponible se determina sobre el Valor Venal del vehículo establecido en las tablas oficiales de Hacienda
2.  IVA o ITP (Obligación Dual): este impuesto dependerá de si el coche es nuevo o usado. En los nuevos se liquidará el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA del 21%). En los de segunda mano se aplicará el Impuesto de Transmisiones Patrimoniales (ITP). La cuantía varía según la Comunidad Autónoma (generalmente entre el 4% y el 8% del Valor Venal) y se gestiona mediante el Modelo 620/621.
3. Impuesto sobre Vehículos de Tracción Mecánica (IVTM): se trata del impuesto municipal conocido como Impuesto de Circulación. Debe liquidarse en el Ayuntamiento donde el solicitante esté empadronado. Se abonará la parte proporcional correspondiente al ejercicio en curso.

Formalizarlo con la DGT

Con la documentación recopilada y estando al corriente de pagos, toca formalizar el trámite con la DGT. Para ello es necesario presentarse en la Jefatura Provincial de Tráfico más cercana con lo siguiente:

• Impreso oficial relleno con la solicitud de matriculación
• Pago de la tasa correspondiente () que cuesta 99,77 euros
• Documentación del interesado (DNI, pasaporte o tarjeta de residencia)
• Documentación original del coche
• Tarjeta de la ITV favorable (Ficha Técnica española)
• Justificantes de pago de todos los impuestos

Presentando todo lo anterior y revisado que está todo correcto, la DGT aprobará el trámite y entregará el permiso de circulación y el número de matrícula española asignado al vehículo. A partir de ahí ya se puede acudir a cualquier centro autorizado a solicitar las placas y empezar a gestionar la póliza de seguro, que es obligatorio para mover el coche.

Costes de matricular un coche extranjero

Para que te hagas una idea rápida, esto es lo que podrías gastar. A esto habría que sumar el coste del coche y los impuestos porcentuales, que varían mucho):

• ITV Previa: 120 – 180 euros
• Ficha Reducida (si no tienes COC): 80 – 150 euros
• Tasa DGT: 99,77 euros
• Placas: 25 – 30 euros

A estas alturas también habría que valorar la opción de la gestoría. Si no tienes tiempo, odias la burocracia o el coche viene de fuera de la UE podría ser mejor dejarlo todo a cargo de un profesional. Habría que sumar a los costes entre 150 y 300 euros por sus honorarios, pero se ahorrarán muchos dolores de cabeza. En todo caso, habría que estudiar si merece la pena todo el trámite y si hay ahorro real respecto a comprar el vehículo en España. Para un coche exclusivo, un clásico o una gran oportunidad puede que sí. Para modelos normales, será dudoso...