Skoda cumple 130 años: analizamos su evolución hasta a la era eléctrica y retos futuros

Skoda cumple 130 años... y de qué manera. Nada de miedo a coches chinos, ya que llega a esta efeméride celebrando su mejor momento histórico, es la tercera marca más vendida de Europa en 2025. El viaje de la compañía, desde un taller de bicicletas en 1895 capitaneado por Václav Laurin y Václav Klement, hasta ser firma global con una gama electrificada sin precedentes, es la prueba de cómo adaptarse y anticiparse a las necesidades de la movilidad en cada época.

La chispa que impulsó a aquellos pioneros sigue viva hoy en la marca: ofrecer soluciones asequibles, accesibles y prácticas para el transporte personal y familiar. La histórica bicicleta Slavia fue solo el principio de una saga que, a través de motocicletas y automóviles, culmina en la actual ofensiva eléctrica y en la apuesta por la movilidad sostenible a gran escala.

130 años de innovación y crecimiento

No es el momento de hacer un repaso completo a la historia de Skoda, pero sí a sus momentos clave:

Los orígenes

Los orígenes de Skoda se remontan a 1895, cuando Laurin y Klement abrieron un taller de reparación de bicicletas en Mladá Boleslav. En pocos años, comenzaron a fabricar sus propios modelos, ampliando el catálogo con motocicletas y, a partir de 1905, el primer automóvil: el Voiturette A. A la solidez mecánica se unía un diseño eficiente y la voluntad de democratizar el acceso al automóvil.

Consolidación y etapas clave

En 1925, Laurin & Klement se fusiona con la empresa Skoda, dando origen a una estructura industrial de gran alcance. Durente el siglo XX, Skoda superó guerras, crisis y desafíos técnicos apostando por berlinas familiares y utilitarios robustos, como el Popular, el Octavia o el icónico 1000MB.

La marca supo integrarse en la economía planificada de la Europa del Este y, tras la caída del Telón de Acero, se integró en el Grupo Volkswagen (1991), ganando acceso a tecnologías modernas y multiplicando su presencia internacional.

Del concepto “Simply Clever” a la electrificación

El principio Simply Clever —ofrecer máximo valor, soluciones prácticas y tecnología de vanguardia a precios razonables— ha sido la seña de identidad de Skoda en el siglo XXI. Ya de la mano de Volkswagen, la marca expandió su gama con modelos superventas como Fabia, Superb o Kodiaq.

La gama actual: electrificación, tecnología y versatilidad

Škoda ofrece hoy la mayor diversidad de su historia. Tras los motores de combustión, llegaron alternativas híbridas enchufables y 100% eléctricos.

Híbridos enchufables

Superb iV y Kodiaq iV utilizan un sistema que combina un motor 1.5 TSI de 150 CV y un motor eléctrico que, en conjunto, entregan 204 CV y se asocia a la transmisión DSG de seis marchas. La autonomía eléctrica supera los 135 km en el Superb iV y alcanza 120 km en el Kodiaq iV (WLTP). La recarga del 10 al 80% puede realizarse en 26 minutos en puntos rápidos (hasta 50 kW). El sistema permite tres modos de uso: 100% eléctrico (E-Mode), híbrido automático y modo Sport, adaptándose a las necesidades y maximizando eficiencia o prestaciones.

Eléctricos

En el evento al que acudimos había unidades de las versiones RS del Skoda Enyaq y del Enyaq Coupé. Son los modelos eléctricos más potentes y rápidos jamás fabricados por la marca. Con dos motores, tracción integral y 250 kW (340 CV), aceleran de 0–100 km/h en 5,4 segundos, alcanzan autonomías superiores a 550 km (WLTP) y admiten recargas a 185 kW (del 10 al 80% en solo 26 minutos).

Más importante quizá es el Elroq, un SUV compacto basado en la plataforma MEB del Grupo VW,  con versiones desde 125 hasta 210 kW, distintas opciones de batería y, en la versión 60, 425 km de autonomía y recarga DC a 165 kW.

Retos de futuro: neutralidad de CO₂ y democratización eléctrica

Y ahora... ¿qué? Esa era la duda que planteamos a la firma, que señaló como retos clave para los próximos años la reducción drástica de su huella de carbono y el liderazgo en electrificación accesible. Estos fueron los puntos principales:

• Modelos eléctricos asequibles: Skoda ampliará su gama por abajo con modelos eléctricos compactos (como el Epiq que se fabricará en Navarra), asequibles para la mayoría de compradores europeos. Prometen conservar sus puntos fuertes: espacio, robustez y autonomía competitiva. ¿Y después? Posiblemente el Vision O Concept, una suerte de Octavia Combi eléctrico
• Optimización de la producción y cadena de suministro: mejorando la huella de carbono en todas las fases industriales, desde la extracción de materias primas hasta el reciclaje de las baterías.
• Formación y adaptación de la red de concesionarios: para una atención integral en movilidad eléctrica y servicios conectados.
• Apuesta por la carga rápida y la integración energética inteligente: con nuevas soluciones de carga doméstica, bidireccional y una mejor experiencia de usuario en la recarga pública (Powerpass, Plug Charge).

Skoda aspira a que, antes de 2030, más de un 70% de sus ventas a particulares sean de vehículos electrificados. La electrificación se asume como un mandato estratégico y ético. Con una gama que ya compite de tú a tú con cualquiera, una hoja de ruta clara hacia la neutralidad de carbono y la democratización del vehículo eléctrico.