La historia de BYD

BYD, fundada en 1995, ha experimentado una transformación notable en el sector tecnológico. En solo tres décadas, ha evolucionado de ser una empresa poco conocida a convertirse en el mayor fabricante de vehículos eléctricos del mundo, superando a gigantes como Tesla. Este impresionante ascenso se atribuye a una estrategia bien definida, una innovación constante y una visión ambiciosa enfocada en la movilidad eléctrica, la sostenibilidad y la independencia tecnológica. Vamos a hacer un repaso por su interesante historia.

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Los inicios

La historia de BYD (siglas de Build Your Dreams) comienza en 1995, cuando Wang Chuanfu, un ingeniero químico, funda la empresa en Shenzhen con apenas 20 empleados. El objetivo inicial era producir baterías recargables de níquel y litio para teléfonos móviles. En poco tiempo, BYD se convirtió en el segundo mayor productor de baterías del mundo, abasteciendo a marcas como Nokia o Motorola.

Ya desde entonces, Wang tenía claro que el futuro estaría en la electrificación del transporte, y en 2003, BYD dio un paso audaz: adquirió la marca Xi’an Qinchuan Automobile, una modesta empresa automovilística china. Este movimiento marcó la entrada de BYD Auto en la industria del automóvil, que es su principal actividad en los tiempos actuales

El salto al automóvil eléctrico

El debut automovilístico de BYD no fue fácil. Aprovecharon bases de la anterior compañía y sus primeros intentos fueron rechazados por los concesionarios. Sin embargo, después llegaría el F3, un sedán convencional que se popularizó por su bajo precio y eficiencia. Fueron saliendo más modelos fruto de la ingeniería inversa. No es ningún secreto que en sus inicios se tomaban ejemplares de otras marcas para replicar sus virtudes y adaptarlas a su

No obstante, el verdadero giro llegó en 2008 con el lanzamiento del F3DM, el primer vehículo híbrido enchufable producido en masa del mundo, precediendo incluso a modelos más conocidos. Ese mismo año, el inversor estadounidense Warren Buffett, a través de Berkshire Hathaway, invirtió 230 millones de dólares en la empresa, adquiriendo el 10 % del capital. Ese movimiento fue clave en su desarrollo, afectando a todos los aspectos de la compañía.

Esta apuesta fue un impulso vital no solo económico, sino reputacional para la marca, que comenzó a ganar prestigio internacional como pionera en electrificación. Durante la década siguiente, BYD lanzó una amplia gama de vehículos eléctricos, desde turismos hasta autobuses. También llegó a otros segmentos, produciendo camiones y soluciones ferroviarias como el SkyRail, contribuyendo a la electrificación del transporte público en grandes ciudades de Asia, América Latina y Europa.

Expansión global y liderazgo eléctrico

A partir de 2015, BYD aceleró su expansión global. Estableció plantas de ensamblaje en América del Sur, Europa y África, y abrió centros de I+D en Estados Unidos, Japón y Alemania. En 2023, BYD alcanzó un hito histórico al superar a Tesla en ventas globales de vehículos eléctricos, consolidándose como el líder indiscutible del sector. Modelos como el Atto 3, Dolphin, Han EV, Tang y Seal han conquistado mercados por su combinación de tecnología, autonomía, calidad y precio competitivo.

En muchos países europeos, BYD ha sido pionera en ofrecer vehículos con batería de fosfato de hierro-litio (LFP), destacando por su durabilidad y seguridad. Además, en 2022, BYD anunció que dejaba de fabricar vehículos exclusivamente de combustión, centrando todos sus recursos en modelos eléctricos puros y enchufables.

Otras marcas de BYD

BYD tiene una serie de submarcas dedicadas a otros campos. La firma principal sería la más generalista, mientras que las que dejamos a continuación tienen un posicionamiento superior:

• Denza
• Fangchengbao
• Yangwang

El logotipo

El logotipo de BYD ha pasado por diversas etapas, pero siempre ha mantenido una estética limpia con las siglas «BYD» en tipografía moderna. Su significado, Build Your Dreams, resume la filosofía de la compañía: construir un futuro mejor a través de la innovación. En versiones recientes, el logotipo ha adoptado una línea más minimalista y tecnológica, en consonancia con su posicionamiento global.

Hitos tecnológicos y curiosidades

• Blade Battery: batería de litio-ferrofosfato con alta seguridad y durabilidad.
• e-Platform 3.0: arquitectura modular diseñada para vehículos eléctricos puros.
• SkyRail y SkyShuttle: soluciones de transporte masivo para ciudades, combinando tecnología ferroviaria y eléctrica.
• Acuerdo con Toyota y Mercedes: alianzas tecnológicas que refuerzan su papel como proveedor de baterías y sistemas eléctricos.
• BYD Auto Finance y BYD Semiconductor: filiales que refuerzan su integración vertical y control del ciclo de producción.

BYD en competición

Aunque BYD no ha participado en campeonatos tradicionales como la Fórmula 1 o el WRC, sí ha mostrado interés en el automovilismo de nueva generación. En 2024, presentó el BYD Seal U Racing Concept, un prototipo de altas prestaciones que anticipa una posible incursión en las competiciones de vehículos eléctricos, como la Fórmula E o campeonatos regionales de turismos eléctricos. Además, la marca ha patrocinado competiciones de e-racing y ha utilizado simuladores como plataformas de marketing y desarrollo tecnológico.

Conclusión

La historia de BYD es un ejemplo de cómo una visión a largo plazo puede transformar una empresa y una industria. De fabricante de baterías a líder de la movilidad eléctrica, la marca china ha sabido anticiparse a las tendencias y colocarse en una posición privilegiada en la transición energética mundial.

Con una cartera de productos sofisticada, una capacidad de producción verticalmente integrada y el respaldo de inversores internacionales, BYD parece estar construyendo no solo sus propios sueños, sino también los de millones de conductores en busca de un futuro más limpio y eficiente sobre ruedas.