Cupra Terramar eTSI 150 CV, a prueba: un coche casi perfecto si buscas un SUV algo especial

Hoy toca conocer al CUPRA Terramar, uno de los coches que más ganas tenía de probar en 2025. Tras el éxito del Formentor la marca española ha ido ampliando su gama de SUV. Por un lado, el Tavascan, un todocamino 100 % eléctrico y por otro este Cupra Terramar, la opción con un enfoque más familiar.

Podemos decir que el Terramar es el primo del Volkswagen Tiguan, un coche que nos convenció en la prueba a fondo. Vamos a compararlo con él. Eso sí, si entonces probamos en Tiguan con motor diésel y tracción total, hoy tenemos la versión más accesible de la gama, el Terramar 1.5 eTSI de 150 CV.

Exactamente con ese motor probamos el CUPRA Formentor. Y nos gustó mucho. ¿Resultará tan bien ese bloque con etiqueta ECO en este coche? A esa pregunta vamos a responder en este vídeo y también si interesa pagar los 43.280 euros que piden por él, que no es poco. Redondeando, unos 6.000 euros más caro que el Formentor con el mismo propulsor y más o menos lo mismo que un Volkswagen Tiguan.

Se trata de un precio sin descuento de ningún tipo. Recuerda que puedes encontrar ofertas del CUPRA Terramar en nuestra sección de coches nuevos, publicadas por concesionarios oficales de la marca. También contamos con herramientas para financiar el coche que te ayudan a pagarlo más cómodamente mes a mes. Toca ahora conocer al CUPRA Terramar más barato:

Exterior

Nada más verlo las similitudes con el Formentor 2024 y otros modelos de la marca saltan a la vista, sobre todo en la parte frontal: faros con los tres triángulos como firma lumínica, una prominente  línea que une las ópticas creando ese morro “de tiburón”, con el logo en color copper sobre el capó, con formas abultadas.

Paragolpes muy agresivos con una zona de refrigeración del motor muy grande en toda la parte baja y, ya hacia el lateral, formas clásicas de SUV, con pasos de rueda en color de la carrocería (azul Fiord en esta unidad de pruebas), como queriendo remarcar que su hábitat natural es el asfalto. Llantas de 18 a 20 pulgadas (nuestra unidad tenía las intermedias de 19, con neumáticos de 255/45).

En cuanto a las medidas, el Terramar se va a los 4.519 mm de longitud, por que es apenas 7 cm más largo que el Formentor. De esa cifra, 2.681 mm corresponden a la distancia entre ejes. Es bastante ancho, ya que mide 1.863 mm y levanta 1.584 mm del suelo.

Ya en la zaga hay dos elementos que definen el portón. Por un lado el logo de CUPRA y por encima el logo de la firma iluminado y unido a una tira que une las ópticas, que siguen el juego de los triángulos. En la parte alta tenemos un pequeño alerón de techo y en la más baja un  paragolpes con zonas negras y grises, como queriendo aligerar la vista de chapa.

Interior

En los la parte delantera tenemos varias cosas en común con otros CUPRA, como el volante, con mandos bien distribuidos, tanto botones físicos como ruletas y dos botones integrados, para arrancar el coche y otro para seleccionar los modos de conducción.

Tras él vemos el cuadro de instrumentos digital, de 10,25 pulgadas, con varios modos para visualizar la información y con información muy completa de viaje y del estado del coche.

En el medio del salpicadero, una pantalla de 12,9 pulgadas para el sistema multimedia. No son las 15 del Tavascan, pero es más que suficiente, la interfaz resulta fácil de usar y, por supuesto, es compatible con Apple Car Play y Android Auto  de modo inalámbrico. Bajo ella, unos controles táctiles para variar volumen y temperatura, retroiluminados.

La posición de conducción es más erguida que en un Formentor, pero sin una sensación de ir muy elevado. Tenemos unos asientos con formas envolventes y una tapicería de que convence, pero puedes elegir otras dos, una de ellas de piel, así como reglajes eléctricos o calefacción. Los de serie me han parecido más que buenos.

No esperes materiales lujosos por el precio del coche. Está bien, con superficies blandas en salpicadero y juega con plásticos con distintas texturas para crear un entorno agradable y bastante bien ensamblado.

No faltan tonos en cobre en los aireadores o en las puertas, así como una lira lumínica que recorre el salpicadero que puedes cambiar de color y que además tiene función de seguridad, advirtiendo si hay vehículos en el punto ciego.

La consola central no es tan espectacular como la espina dorsal del Tavascan, pero recuerda ligeramente y es práctico. El selector del cambio está en un mando tras el volante y libera espacio en esa zona, donde encontramos algunos mandos, base de carga inalámbrica, un par de reposavasos y un cofre bajo el reposabrazos. Se puede mover hacia arriba pero es una pena que no longitudinalmente, a algún conductor le puede quedar algo retrasado.

Muy buenas las plazas traseras, el aspecto donde mejora claramente al Formentor. Se accede mejor a ellas, tienen un espacio longitudinal muy bueno, como un Tiguan y también hay una buena altura libre al techo.

Además, cuenta con una banqueta trasera que puedes desplazar longitudinalmente unos 15 cm, puedes reclinar los respaldos ligeramente para viajar más cómodo y tenemos salidas para la climatización, en las que se puede variar la temperatura además del caudal y un par de tomas USB-C para los pasajeros traseros.

¿Problemas? Pues un tercer ocupante, además de una banqueta más corta y respaldo más duro (oculta un reposabrazos), tiene un túnel central que le complica colocar bien los pies. No tenemos ni siquiera bolsillos tras los asientos y la forma de los reposacabezas también resta visibilidad y luminosidad detrás. Puedes poner un techo de cristal… pero pasando por caja (son 1.486 euros).

Maletero

¿Qué se busca además de amplitud de inteior en un SUV familiar? Pues capacidad de carga. El Cupra Terramar ofrece un buen maletero, con portón eléctrico, de 540 litros en la posición más retrasada de los asientos y, cuando los llevamos hasta delante aumenta hasta 642 litros, que es una cifra más que buena para su tamaño.

Esa cifra incluye los 32 litros que hay bajo el piso, un espacio que no podrás aprovechar demasiado porque tenemos una rueda de repuesto temporal, herramientas y otros pequeños huecos a su alrededor.

Por lo demás, el maletero principal es un espacio de formas bastantes regulares donde no faltan sujeciones para la carga o perchas para colgar bolsas, con puntos de luz a ambos lados.

Si algún día necesitas transportar enseres grandes, puedes abatir los respaldos de los asientos traseros. Divididos en tres secciones, en proporción 40:20:40, consigues un espacio prácticamente plano de 1.725 litros de capacidad.

Motor

La gama de motores inicial tiene versiones VZ de gasolina con tracción total 4Drive, con 204 y 265 CV, que pudo probar Mario durante la presentación del modelo. Puedes elegirlo también híbrido enchufable, hay dos versiones eHybrid de 204 y 272 CV. Pero el más barato, sin tener en cuenta las ayudas a la compra, es este 1.5 eTSI de 150 CV.

Es el motor 1.5 que se vende desde hace mucho tiempo en el Grupo Volkswagen, de cuatro cilindros y cuatro válvulas por cada uno de ello, inyección directa y turbocompresor. Entrega sus 150 CV de potencia máxima a 5.000 rpm, con un par máximo de 250 Nm entre las 1.500 y 3.500 rpm.

El Terramar con este propulsor pesa 1.638 kilos, 156 kg más que el Formentor (que se queda en 1.482 kg). Aún así sus prestaciones son buenas, ya que acelera de 0 a 100 km/h en 9,3 segundos y alcanza 205 km/h de velocidad punta. Y sin gastar demasiado, ya que homologa 6,2 l/100 km, en parte gracia al sistema de 48 voltios y al pequeño motor eléctrico de 18 CV con el que obtiene la etiqueta ECO.

Más allá de estas cifras, que puedes consultar en cualquier lugar, veamos cómo va:

Comportamiento

Me gustó mucho el comportamiento del Tiguan y reconozco que soy fan de cómo se mueve el Formentor. El Terramar va también muy bien. La puesta a punto no es tan cómoda como la del Volkswagen, pero es más ágil y resulta muy fácil llevarlo rápido en zonas de curvas, con gran sensación de control. Diría que más que el Formentor con el mismo motor y tiene explicación: detrás monta una suspensión multibrazo y no una barra de torsión.

Las versiones VZ montan suspensión adaptativa, todavía más elaborada y que pueden cambiar mucho el carácter del coche. Aquí solamente lo podemos hacer con los modos de conducción, dos en esta versión: Confort y Performance, además del Individual. Se nota el cambio sobre todo en reactividad al acelerador y respuesta del cambio.

Tenía dos dudas con el coche ¿Es suficiente el motor 1.5? Desde luego. Los 150 CV mueven el coche no de modo explosivo, pero sí con solvencia. Le ayuda mucho la electrificación, porque mejora la respuesta a bajas revoluciones y suaviza la entrada del turbo, por lo que responde mejor en todo momento, es mucho más elástico.

Se asocia al cambio automático DSG de doble embrague con siete relaciones. Una transmisión rápida para un uso normal y de funcionamiento suave. Puedes usarlo de modo manual con las levas tras el volante, pero salvo en algún puerto de montaña o alguna reducción puntual, el cambio automático va realmente bien.

Mi segunda duda era el consumo. Y reconozco que me sorprendió. En un viaje de 900 km de Madrid a País Vasco, el consumo medio registrado fue de 6,4 l/100 km. Una cifra muy similar a la que logré con el CUPRA Formentor con ese propulsor (hay apenas 0,4 l/100 km en las cifras de homologación).

La pequeña microhibridación ayuda a moverse a vela y a bajas revoluciones, entre las 1.250 y 3.000, aproximadamente, el motor se mueve en muchas ocasiones con solo dos cilindros. A esta cifra contribuye el coeficiente de resistencia aerodinámica (Cx) de 0,28.

Opinión coches.com

En una Europa que apuesta todo a lo electrificado, el Volkswagen Tiguan está arrasando en ventas. Este primo suyo, el CUPRA Terramar ofrece una imagen menos conservadora y una suspensión que no resulta incómoda en autovía o ciudad y que contiene muy bien los movimientos de la carrocería en curva.

Un carácter más indómito, digamos, ofreciendo ese plus de espacio y confort respecto al Formentor. Indómito no significa deportivo, al menos con esta versión 1.5 eTSI que ofrece a cambio consumos ajustados y etiqueta ECO mejores que los de las versiones VZ.

¿Me lo llevaría a casa? Con los ojos cerrados porque veo que los rivales, para controlar sus carrocerías, deben apostar por suspensiones más duras e incómodas y pocos ofrecen esa sensación de control en curva. Su problema es el precio. Tengo un Seat en casa de 125 CV de potencia y cuando veo que me costó, en 2012, unos 17.000 €, asuste pensar que el Terramar, en caso de que me encapriche con un color, una tapicería es fácil que el precio final suba de los 50.000 euros. El triple de lo que pagábamos entonces por un coche nuevo.