Ford Mustang nuevo

Fue a principios de 2024 cuando por fin se abrieron los pedidos del Ford Mustang (con código interno S650) que ya llevaba un tiempo en venta en Estados Unidos y que cosechó un enorme éxito en Europa, siendo el deportivo más vendido en el Viejo Continente desde su llegada en 2015, tras medio siglo recorriendo carreteras americanas.

Respecto a su predecesor, no varió mucho su silueta o proporciones, con su característica silueta tipo fastback. Ganó un frontal más robusto, con faros más rectangulares con tres ópticas en su interior, una mayor parrilla o una zaga con un pliegue más pronunciado acompañado de un alerón. 

Más cambios en el habitáculo, con una instrumentación digital con pantalla de 12,4 pulgadas que muestra el diseño con varios diseños, unida a otra pantalla en el centro del salpicadero de 13,4 pulgadas con el sistema de infoentretenimiento SYNC 4, compatible con Amazon Alexa, Apple CarPlay y Android Auto y que jubiló a algunos botones, si bien conservó los principales. Varió el volante, con formas más cuadradas. Esta nueva generación del Mustang prestó atención también a los sistemas de seguridad y asistencia al conductor. Incluye reconocimiento de señales de tráfico, control de crucero adaptativo inteligente con función Stop & Go, asistente de centrado de carril, dirección asistida evasiva o un asistente de frenado en marcha atrás.

En el apartado mecánico, a Europa llega con la versión GT que monta V8 de 5.0 litros, mejorado con un nuevo sistema de inducción de aire con un diseño de doble toma y doble cuerpo de mariposa que permite mayores caudales. Entrega 487 CV y 562 Nm, aunque se pueden sumar otros 6 CV con el escape de alto rendimiento. Puede asociarse a una caja de cambios manual de seis velocidades o una automática de 10 relaciones y ofrece seis modos de conducción: Normal, Sport, Deslizante, Drag, Pista, más uno personalizable. No faltan frenos Brembo de 19 pulgadas y puede tener la suspensión activa opcional MagneRide. El colofón es la versión Mustang Dark Horse enfocada al circuito, que eleva el V8 a los 507 CV y 566 Nm de par que lo convierten en el Mustang 5.0 de producción más potente de la historia.